Son muchas las veces que me quedo despierta pensando en cosas que pasan por mi vida. Anoche en unas de mis rutinas de pensamiento llego a mi mente como ha influido la tecnología en mi vida, voy a decir que ha sido positivo pero otras veces no tanto.
Me he dado cuenta que gracias a la tecnología estoy aún más recogida en mi burbuja que no tengo amistades a quien llamar y decir vamos a vernos, pero si tengo un montón de gente en las redes sociales que solo interactúan por ahí.
Me puse a pensar en que es lo primero que hago al levantarme y lo último que hago al acostarme y vi que paso demasiado tiempo con mi celular en mano, parece una extensión de mi brazo siempre está cerca y aunque sea para hacer nada siempre llega la curiosidad de tocarlo, aunque sea para mirar las fotos.
Por esta razón he decidió ponerme horarios para estar con mi móvil, ya que con la PC es otra cosa porque trabajo el día entero con ella no puedo abandonarla, pero por lo menos el celular si puedo limitarlo.
Decidí que a partir de este lunes haré lo siguiente:
- No más celular en horas de la mañana hasta las 9 no le pongo la mano.
- Hora de almuerzo con familiares o amigos me olvido del celular
- Algún coro interno con personas chévere, dejare el celular en la cartera.
- A las 9 de la noche ya no tendré el celular conmigo y disfrutare del final del día junto a mí ser querido.
Son cosas que he decidido porque no quiero seguir dependiendo tanto de mi celular, sé que en el futuro todo lo haremos a través del móvil pero mientras tanto voy a tratar de disfrutar mi vida de la manera en que me enseñaron, prestando atención a las personas y escuchando atentamente lo que me dicen.